Seguimos hablando de la respiración y cómo nos facilita la realización de ciertas asanas.
En el armado de las posturas invertidas, es fundamental concentrarnos en la respiración, ésta debe ser tranquila y pausada.
Ya en la postura no debemos olvidarnos de respirar. Siempre por la nariz, en forma coordinada, llenando de aire nuestros pulmones. Esto nos facilitará mantener la postura en perfecto equilibrio.
En estos casos puede ser muy beneficiosa la respiración dorsal antes de comenzar, es la que se realiza con la parte alta posterior de nuestra espalda, ya que descontractura y relaja la parte dorsal de la columna vertebral. La postura del niño facilita este tipo de respiración.