En la ciudad de Rosario (Argentina) , zona oeste, he creado un espacio único donde el yoga se adapta a las necesidades individuales de cada persona, ofreciendo clases en pequeños grupos y con un enfoque personalizado.
El mundo nos obliga a un entorno cada vez más acelerado y exigente, pero el yoga se presenta como un oasis de paz y bienestar, es una herramienta poderosa para conectar con nuestro cuerpo, mente y espíritu.
Sin embargo, muchas personas se sienten intimidadas por la idea de unirse a una clase grupal tradicional, temiendo no seguir el ritmo o sentirse fuera de lugar.
¿Qué hace que mis clases sean especiales?